martes, 22 de agosto de 2017



Tengo miles de preguntas para mi abuelo Tito, el agrimensor, todo sobre las distancias y su medición.  En el 2011 abrí organizacionespaciall.blogspot.com.ar y fue el espacio donde publiqué casi todo lo que escribí.  Siempre la pregunta fue sobre el espacio y el territorio. Alguna obsesión sobre el orden que siempre me persigue y sobre las funciones. Vivo en un país inmenso y muy cerca del nervio, a veces en el nervio mismo.



 Mi primer libro fue Planificación Estratégica. Está en internet. Mi compañera Emilia Rodriguez Pena lo subió a scribd. Lo pueden leer de ahí. Todavía nunca lo imprimimos pero ya tenemos la tapa que dibujó Romina Celeste Miguez y quiero que mi madrina Carol Tri  haga todo que queda del diseño. Carol diseñó el primer libro que imprimí que es posterior en escritura a Planificación, se llama “Memoria de la luz y estructura de Cristal”, me da mucha paz que ella haga algo así tan importante para mí y que compartamos un trabajo. Después mi hermana encuadernó y  construyó los 50 objetos libros, fue un amor inmenso.

 Volviendo al principio, en Planificación Estratégica hay mucho del territorio. Está el espacio desde la visión de un boyscout o una niña en el verano ya planteándose locuras más imperiales. En el dibujo de tapa está Kirsten Dunst como María Antonieta en esa fantasía que armó Sofía Coppola. Está ella sobre un mapa de estrellas y eso me encanta. No sabemos si son territorios o son constelaciones trazadas a partir de la luz de cada estrella. Sobre la cabeza María Antonieta tiene un barco que hace de sombrero, me alucina como trabaja la imagen Romina.

En un momento medio que me copé con el rap y sin querer entró algo del mundo del graffiti también. Ahí aparece el espacio, obvio, pero en disputa, y todo siento que es un poco sobre eso. Pero a la vez es taguear sobre un espacio que quizás no se disputa nadie, sobre un lugar abandonado, o a una altura inalcanzable. Pasaron muchas cosas en ese momento y todavía me parece un momento de mucha fantasía. Carlotto recuperaba un nieto y el Doble ya empezaba  a taguear el cielo. Yo hice un poemario que se llamaba  “Montonera de otra era” , ahí hay algunos raps y está la política puesta en un plano algo anacrónico, tal vez por un modo de decir heredado de la militancia de los 70 y de los estudios de Sociología , pero a la vez el lenguaje necesitaba recuperar algo, y volver a sentir el brillo de una premonición. Fue un fancine que hicimos para llevar a Córdoba y que fuera parte del archivo de una  fancinoteca. Me ayudó mi novio en ese entonces, Francisco Alvarez e hizo un dibujo  en base a una foto de Audrey Hepburn  en la adaptación de “Desayuno en Tiffanys” . En el dibujo Audrey  fuma, solo hace eso, pero en ese gesto se esconde algo  y sin saber hace la  “V”. Mi papá pitaba los Marlboros sosteniéndolos con el pulgar y el dedo índice pero no es muy común, casi todos fumamos haciendo la v.


Después lo último que hice se llama BB BRECHT y es un fancine con un bebé en la tapa que dibujó mi amiga Micaela Piñero. Quería ver la anatomía de un bebé y me mostró un poco eso, un bebé azul y todas sus cositas adentro. A la vez está protegido por un aura o una incubadora, porque no cualquier espacio es propicio para un bebé y se vuelve todo muy delicado, además hay como cierto culto por la infantilización al punto de que somos todos bebotes.  Me interesó la distancia brechtiana, su espíritu crítico, en conjunción con  la sensibilidad de un bebé. De repente algo se mezcló ahí de modo muy caprichoso como quien lee una casualidad como señal:  en las iniciales de Bertold Brecht estaba el bebé. Mientras tanto yo me preguntaba cómo distanciarme de esos mimos o por qué debía hacerlo.